Con la publicación del “Diálogo de Valor”, se recogen los temas afrontados durante la temporada de accionariado activo 2015 con las 27 sociedades, italianas y extranjeras, junto a las cuales Etica Sgr ha dialogado activamente en representación de los más de 100.000 clientes suscriptores de los fondos “Valores Responsables”.
La sensibilidad de los inversores ha cambiado y cada vez se presta cada vez más atención a los impactos extra-financieros de las inversiones a fin de crear valor a largo plazo para la economía y para la sociedad en su conjunto. A este respecto, Etica Sgr siempre ha estado implicada en la actividad de compromiso y accionariado activo con el objetivo de establecer un diálogo estructurado con la administración empresarial en cuyos fondos invierten, a fin de supervisar y mejorar los aspectos ambientales, sociales y de gobernanza relativos a la actividad empresarial.
En el transcurso del 2015, además de dar continuidad a los temas afrontados en los años anteriores –come la rendición de cuentas socio-ambiental, las remuneraciones de la alta dirección y la protección de los derechos humanos a lo largo de la cadena de suministro– la actividad de gestión y accionariado activo ha centrado las inversiones en temas asociados a la “comida” y al “cambio climático”, es decir, a los temas de la exposición universal EXPO Milán 2015, solicitando más concretamente la adopción de prácticas inherentes a:
- El respeto de los derechos de los trabajadores en el sector agroalimentario.
- El uso de ingredientes diferentes del aceite de palma en los productos.
- Una comunicación transparente sobre el uso de OGM y pesticidas.
- La adopción de sistemas eficaces para la trazabilidad de todos los ingredientes.
- La presencia de objetivos cuantitativos de reducción de gases que alteran el clima.
- El compromiso en el cálculo de la carbon footprint.
- El correcto uso de los recursos hídricos en los procesos productivos.
El diálogo continuado y positivo con las empresas ha permitido conseguir diferentes resultados: algunas sociedades han redactado su primer balance de sostenibilidad, otras han introducido evaluaciones socio-ambientales en el proceso de selección de los proveedores y otras se han sumado a iniciativas de responsabilidad social empresarial.